martes, 28 de marzo de 2017

5 SEÑALES DE QUE NO ESTÁS CON UN EQUIPO EXITOSO

Trabajar en equipo es uno de los grandes principios del éxito, para conseguir tu sueño de Emprendedor debes rodearte de un equipo que juegue a ganar y tenga la Misión bien clara y apueste todo por ella. Hay otras características a las que debes poner atención para saber si estás con el equipo correcto, o por el contrario, será un obstáculo para lograr tus metas. Estas son las 5 señales de los equipos que no son exitosos.

Cada quien ve por sus propios intereses: Aquí no existe un verdadero trabajo en equipo pues cada persona está buscando sus propios beneficios, y no los del grupo. Esto tiene una gran dosis de egoísmo y a la larga es un veneno que mata: los sueños, la motivación y el empuje general. Un buen equipo pone primero la Misión de la empresa por encima de sus intereses personales y tiene bien claro que ayudando a los demás se ayuda a sí mismo. 

Hay chismes: Nada más desgastante que estar oyendo chismes y rumores, conversaciones divisorias y toda esa basura mental que generan los chismes. Un equipo de éxito tiene una buena comunicación y cuando las cosas no están funcionando se tiene el valor de hablarlo de frente y tratar los problemas con quien se debe, antes de estar dispersando malos comentarios entre los demás. 

No celebran el éxito de los demás: Para decirlo claramente: hay envidia. Cuando alguien consigue un logro, no importa si es grande o pequeño, algunas personas se sienten celosas o envidiosas y en lugar de festejar y sentirse felices por los logros de sus compañeros, tienden a minimizar lo logrado con frases como “yo lo hubiera hecho mejor”, “no es tan importante lo que hizo” “le faltó tal o cual cosa”. Un equipo exitoso se alegra genuinamente de las victorias y las metas alcanzadas por los otros y hasta las celebra como si fueran propias, con alta energía y felicidad auténticas.

Obstaculizan el trabajo de los demás: Esto muchas veces lo hacen por mero gusto de molestar. ¿Has trabajado con alguien así? Entonces me podrás decir que es sumamente desgastante estar con gente tóxica que por el solo hecho de molestar se dedican  a poner trabas al trabajo de los otros. Cada “guerra” ganada es un triunfo para este tipo de gente, y no logran entender que si uno pierde, pierden todos en el equipo. 

Hay una guerra de egos: Todos quieren brillar a costa de lo que sea, sin entender que para poder ser exitoso individualmente tienes que ayudar a los integrantes de tu equipo a que también lo sean. Todos quieren sobresalir sin importar si en el camino van “pisando” a otros, y para ello usan la manipulación, mentiras, chismes y muchos golpes bajos.  El Ego es un gran enemigo en la vida en general y también en las empresas. 

La pregunta hoy es: ¿cómo puedes transformar a un equipo tóxico en un equipo de éxito?


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martes, 21 de marzo de 2017

LAS IDEAS POR SI SOLAS NO FUNCIONAN

¿Cuántas ideas de negocio has tenido? Casi estoy seguro que desde que eras muy pequeño se te ocurrieron negocios que llevaste a la práctica en el mundo del juego. Quizá pusiste un pequeño restaurant para venderles a tus amigos pasteles de lodo, o quizá en compañía de tus amiguitas pusiste un supermercado y vendías piedras, hojas de árboles, juguetes viejos, o en el mejor de los casos dulces de verdad.

En mi caso mi primer gran negocio lo hice vendiendo bicicletas cuando aún era un adolescente y de ahí pude conseguir el dinero para comprar mi primer coche, ahorrando e invirtiendo.

Estos son ejemplos claros que nos demuestran que desde niños tenemos una actitud emprendedora, incluso muchos niños llevan a cabo negocios de verdad, venden dulces con sus compañeros de la escuela, conozco a una amiga que de niña vendía por catálogo aretes y artículos para el cabello con sus amigas del colegio.

Pareciera que cuando el tiempo pasa mucha gente va olvidando los negocios y se mete al mundo de la escuela y los deberes académicos, esto no está mal, estudiar es muy importante hoy en día, sin embargo el hacer negocios es lo que te dará tu libertad financiera, a menos que te saques la lotería, probabilidad muy escasa, seamos honestos.

¿Dónde quedó el niño emprendedor que vive en ti? Piensa en tu primera idea de negocio ¿qué pasó con ella? ¿La olvidaste o la hiciste realidad? O bien ¿la cambiaste por otra?
Una idea no funciona por sí sola, hacen falta más elementos para volverla tangible. Hará falta trabajo, dinero para invertir, tener clara una Misión, rodearte de gente que sepa más que tú, capacitarte, aprender a ser generoso también.

En nuestro libro ¿Cómo ser un emprendedor?... sin tanto rollo” mi amigo Ferenz y yo describimos los 10 puntos que todo aquel que entra en el mundo del emprendimiento debe aprender a desarrollar, y digo aprender, porque quizá no hayas nacido con esas cualidades sin embargo nos queda claro que también pueden ser aprendidas a través de la práctica. 
Hay muchas ideas brillantes para hacer negocios, también existe mucha gente talentosa para hacerlos, pero no basta ni la idea ni la gente, lo que funciona es la práctica, el trabajo día a día, el empeño, que junto al enfoque y la constancia es lo que verdaderamente provoca los resultados.

Recuerda que una idea por sí sola no funciona, lo que la hace funcionar es la decisión, el entusiasmo y las ganas que tengas de llevarla a cabo.


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martes, 14 de marzo de 2017

LAS TRAMPAS DE LOS EMPRENDEDORES

Me encanta el tema del Emprendimiento, a eso me dedico, a ser emprendedor y ayudar a otros a ser Emprendedores. Durante mi travesía en este mundo de los negocios he escuchado muchísimas historias de mis propios clientes, historias de las cuales aprendo y reflexiono. He tenido yo mismo muchos errores en este camino, he caído en algunas trampas al emprender, pero ¿a qué me refiero con trampas, qué son? Son errores de pensamiento y actitud en las que muchas veces cae la gente al emprender. Hoy quiero mostrarte 3 de ellas:

“No tengo dinero suficiente”: Muchos quieren emprender, tener su propio negocio, dejar de ser empleados para ser libres: lo que buscan es libertad financiera y también libertad de tiempos. Tienen una idea de negocio, quizá hasta un proyecto ya hecho, pero entonces caen en la primera trampa al decir “no tengo dinero para emprender”. Es verdad que para iniciar un negocio se necesita dinero, y también es verdad que a veces no se tienen los recursos suficientes (o incluso no se tiene nada) y por eso de detienen. La solución: busca a alguien que quiera invertir contigo. No tienes por qué forzosamente hacerlo solo, es probable que encuentres a alguien que también desee lo mismo que tú y esté dispuesto a invertir junto a ti.

Creer que hacer negocios solo se trata de hacer dinero: En mi libro “Cómo ser un Emprendedor… sin tanto rollo”, explico que Emprender no es solo crear una empresa, Emprender es una actitud ante la vida: es ser perseverante, auto disciplinado, persistente. El Emprender Implica crecimiento a nivel personal, emocional, espiritual y por supuesto financiero, pero si te enfocas solo en este último, caerás en la trampa de ir solamente tras el dinero, y cuando éste aun no llegue a tus manos, te sentirás desmotivado y querrás renunciar a tu sueño. ¡Ojo!, el dinero evidentemente es una parte fantástica de emprender, pero no es el todo. Emprender es integral, es un desarrollo de las personas en muchas áreas de su vida, cuando emprendes correctamente, invariablemente crecerás como persona.  

Creerse dueño de negocio, antes que líder. Si ya estás dentro del Emprendimiento, si tienes un negocio, grande o pequeño, tienes que ser un líder (aparte de “jefe” o dueño del negocio). Un verdadero líder es aquel que inspira y motiva a su equipo de trabajo con un ejemplo positivo, un líder sirve: a sus clientes, a sus socios, inversionistas, a sus empleados. Y además un líder  posee humildad y utiliza su liderazgo para formar más líderes, ayuda a los demás a crecer  y ser mejores, es responsable al 100%  y se enfoca en educar a su equipo. Ser el dueño es genial pero ser líder es fantástico.


La pregunta hoy es: ¿en cuáles de estas trampas has caído al emprender?


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lunes, 6 de marzo de 2017

LOS MALOS HÁBITOS DE ALGUNOS EMPRENDEDORES

De manera natural todos tenemos ciertas actitudes repetitivas que se convierten en hábitos, y un Emprendedor no está exento de tenerlos, lo malo es cuando estos hábitos en lugar de ser positivos son lo contrario, y entonces llevan a los emprendedores a cometer un error tras otro y sobre todo, a perder demasiado tiempo, productividad, energía y hasta dinero.  Estos son los malos hábitos que deberás evitar:

1. Hacer todo solo: Esto es un desgaste de energía impresionante, pues no te alcanza la vida y se te van los minutos, los días y hasta los meses queriendo hacer las cosas y nunca terminas. Sé humilde y cede ante la tentación de la autosuficiencia, reconoce que hay otras personas que pueden ayudarte y que incluso hasta pueden hacer muchas cosas mejor que tú; esto nos lleva al punto siguiente….

2. No delegar: Directamente ligado con el hecho de querer hacer las cosas tú solo se une el mal hábito de no delegar. Hay cosas en las que tú puedes ser un experto y nadie mejor que tú para hacerlas, pero indudablemente habrá otras que tendrás que “soltar” para que alguien más las haga.  Aprende a distinguir aquellas tareas que son para ti, y aquellas otras en las que alguien puede ayudarte ¡ahorrarás preciado tiempo y energía!

3. Pensar constantemente que todo lo sabes: Es el síndrome de “eso ya lo sé” y puede ser letal para el éxito de un hombre de negocios. Cuando alguien más propone una idea y tu vocecita interna te dice “eso ya lo sé” estás matando en automático la posibilidad de aprender cosas nuevas, conocer otras perspectivas e incluso cortas tu creatividad. No hay nada peor para un Emprendedor que creer que lo sabe todo y que es el dueño de la verdad. Por el contrario, si reconoces que siempre se puede aprender, de todo y de todos, abres posibilidades fantásticas para crear, mejorar o implementar nuevas cosas.

4. No poner límites: En el afán de conseguir el éxito empresarial a toda costa, invertimos mucha energía: mental, emocional, espiritual y física. Si no sabes establecer límites contigo mismo es casi seguro que terminarás agotado. Es verdad que un emprendedor trabaja mucho más que otras personas pero ¡atención! tu cuerpo también necesita descanso y relajación. No caigas tampoco en la pereza, simplemente establece límites saludables para tu vida, para tu cuerpo. ¡cuídalo!


5. Posponer las cosas: Nada peor para la productividad y el éxito (en tu negocio o en tu vida) que estar posponiendo una y otra vez las cosas, esto es un pésimo hábito. “Lo dejo para después” “mañana sí lo haré” “al rato lo hago” son frases que salen constantemente de la boca de quienes son expertos en procrastinar. Pon manos a la obra ahora y deja de estar evadiendo todas esas cosas que sabes que debes hacer. Cumple tus tareas en tiempo y verás que tu productividad aumentará. 

La pregunta hoy es: ¿estás dispuesto a superar estos hábitos?

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